Los dos son grandes himnos que me gustan cantar.
De rodillas, Señor, ante el sagrario
Himno del congreso eucarístico de Barcelona de 1952
Letra: Jose Mª Pemán
Música: Luis Aramburu
De rodillas, Señor, ante el sagrario
que guarda cuanto queda de amor y de unidad.
Venimos con las flores de un deseo
Para que nos las cambies en frutos de Verdad:
Cristo en todas las almas
y en el mundo la paz,
Cristo en todas las almas
y en el mundo la paz.
Tiradas a tus plantas las armas de la guerra
rojas flores tronchadas por un ansia de amar
hagamos de los mares y la tierra
como un inmenso altar, como un inmenso altar.
Como estás, mi Señor, en la Custodia,
igual que la palmera que alegra el arenal,
queremos que en el centro de la vida
reine sobre las cosas tu ardiente caridad:
Cristo en todas las almas
y en el mundo la paz,
Cristo en todas las almas
y en el mundo la paz.
Como ciervos sedientos que van hacia la fuente
vamos hacia tu encuentro sabiendo que vendrás,
que el que la busca es porque ya en la frente
lleva un beso de paz, lleva un beso de paz.
De rodillas, Señor, ante el sagrario
que guarda cuanto queda de amor y de unidad.
Venimos con las flores de un deseo
Para que nos las cambies en frutos de Verdad:
Cristo en todas las almas
y en el mundo la paz,
Cristo en todas las almas
y en el mundo la paz.
que guarda cuanto queda de amor y de unidad.
Venimos con las flores de un deseo
Para que nos las cambies en frutos de Verdad:
Cristo en todas las almas
y en el mundo la paz,
Cristo en todas las almas
y en el mundo la paz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario